Recientemente surgen diversos comentarios que causan desaliento en el área educativa y la sociedad; estos relacionados con el despido de personal administrativo del programa de Inglés en Sinaloa (PRONI), donde el argumento ha sido la falta de presupuesto; situación que pone también a los asesores del idioma inglés en un hilo que podría romperse en cualquier momento.
El programa de Inglés en Sinaloa tiene 15 años, poniendo a este Estado como uno de los pioneros que ha ofrecido a partir del nivel de preescolar y primaria la enseñanza de este idioma como lengua extranjera, teniendo como propósito favorecer el aprendizaje del idioma Inglés, con el fin de que los estudiantes obtengan las bases lingüísticas necesarias en la actualidad.
Durante estos años, se puede decir que tanto coordinadores como asesores han reforzado los procesos de enseñanza y aprendizaje de este idioma, recibiendo un pago de $62 pesos con 50 centavos la hora y que desde que inició el programa no ha tenido aumento alguno, sin tener los derechos que todo trabajador del área educativa adquiere; como el derecho a los servicios de salud, prestaciones, vacaciones sufragadas, entre otros.
Con ello, se puede asegurar que quienes forman parte de este programa han realizado su trabajo cumpliendo con la vocación de servir y contribuir en el proceso educativo lingüístico, sin dejar a un lado las capacitaciones como talleres, diplomados y licenciaturas que han permitido el fortalecimiento académico y la certificación académica internacional de los coordinadores y asesores.
Ante la información que corre por los diferentes medios informativos y redes sociales, sobre el despido por falta de presupuesto, pone al Programa Inglés Sinaloa en una situación difícil e incierta que no solo desconcierta a su personal, también a instituciones educativas y a la sociedad que considera favorable la implementación de la enseñanza del inglés en las escuelas públicas de educación básica , en Sinaloa.